1978: El cantautor argentino León Gieco compuso esta canción inspirado en duros acontecimientos sociales de la época como la dictadura militar de su país, el exilio de la cantante Mercedes Sosa y el posible conflicto bélico entre Chile y Argentina que redundaba por aquel entonces.
En la letra de esta canción vemos representados los fuertes deseos no solo de un artista, sino el eco de las voces de exiliados, de inmigrantes, de refugiados, del mundo inconforme con dictadores, malos gobiernos, políticos deshonestos, indiferencia, impunidad y las injusticias que se percibían.
Es preocupante que esta canción aun se pueda contextualizar a nuestra realidad, es realmente alarmante que estemos en el año 2010 y se continúen agudizando las problemáticas que se manifestaron hace 32 años, cuestionemonos, cuestionate niño, joven, adulto, adulto mayor... ¿Porque continuamos sumidos en la injusticia? ¿Porque aun en el 2010 las dictaduras reprimen a ciudadanos y los llevan a la muerte? ¿Porque mueren ciudadanos solo para mostrar resultados de una guerra civil financiada? ¿Porque los periodistas críticos escasean? ¿Porque tanta indiferencia? ¿Porque debo callar?.
Somos ciudadanos de este mundo, solo nosotros decidimos sumirlo en la violencia, la guerra, la impunidad, la represión o hacer de este un maravilloso lugar, con defectos y conflictos, por supuesto, pero también con tranquilidad, con libertad de expresión, con paz, respeto, con ciudadanos pensantes, capaces de solucionar conflictos como tales, no como seres inadaptados, ¿guerra? ¿armas?... eso está obsoleto... ¿Que pasa con el mundo?...
En esa pregunta radica el porqué de este espacio, quizás no sea una persona perfecta, se que no tengo un comportamiento ejemplar, me equivoco constantemente, cuestiono incluso con mayor frecuencia, puede que no dedique mi vida a trabajar por los mas necesitados, que solo sea una persona común y corriente, que mis ideas y pensamientos no sean muy innovadores, que mi nombre mañana sea olvidado, que no vayas a visitar este blog nunca mas porque te aburren los ilusos que creen que pueden cambiar el mundo con reflexiones tontas, que sea algo egoísta, pero se que si yo cambio, tu cambias, juntos cambiaremos nuestro entorno, soy consciente que no todo el mundo lo hará, también que no todos leerán estas palabras pero soy una persona que sueña y cree. Y en este momento creo en "la revolución de las cosas pequeñas" como dice Pirry, así que revolucionemos positivamente nuestro entorno, no digo que no te enojes, digo que manejes tu ira, digo que no nos faltemos al respeto, digo que nos eduquemos. Creo en que la educación es la clave, educar al perezoso, al irresponsable, al que toma lo ajeno, al que discrimina, al homofobico, al racista, al deshonesto, todos tenemos algo que cambiar, a todos nos falta educación.
Puede que te llegue a parecer poco interesante conocer las historias que voy a presentar, finalmente deben ser cultura general, finalmente no son las unicas, e ironicamente como diría Jaime Garzón o mas bien su celebre personaje Heriberto de la Calle en la entrevista con Jose Gabriel "...este país se escandaliza porque uno dice "hijueputa" en televisión, pero no se escandalizan cuando hay niños limpiando vidrios y pidiendo limosna, eso si no, eso es folclor"... así que dado esto no se que tan importantes les parezcan estas vidas que lucharon por un mundo mejor.
No espero con estas palabras cambiar el mundo, solo espero tocar el pensamiento de alguien, con eso me bastará, con saber que una persona se cuestionó.
En este espacio irán encontrando información cronológicamente de grandes personajes que lastimosamente han quedado en el olvido como consecuencia del alzheimer que padece el mundo. Vidas como las de Victor Jara, Chico Mendes, Andres Caicedo, Jaime Garzón y Orlando Zapata, que no comparten ni las fechas de nacimiento, ni lugares, ni amores, pero todos pensaron diferente, se cuestionaron, lucharon por sus derechos, porque tu y yo despertáramos, por las injusticias, fueron inconformes con propuestas y no podemos olvidarlos, por ellos, por nosotros y por quienes vendrán... Pensemos Diferente.
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